lunes, 15 de octubre de 2007

Las lluvias dejan al menos 22 muertos y miles de damnificados en Centroamérica

SAN SALVADOR - Las intensas lluvias que ha provocado un sistema de bajas presiones en la región centroamericana han ocasionado hasta el momento 22 muertes, un número similar de desaparecidos y miles de damnificados, según confirmaron durante fin de semana las instituciones de socorro y de prevención de El Salvador, Costa Rica, Honduras, Nicaragua y Guatemala.

Los casos más dramáticos, se han registrado en Costa Rica y Honduras, donde los muertos ascendieron a 20.

En Costa Rica, el pasado jueves una avalancha causada por una masa de 50.000 metros cúbicos de tierra, piedras y árboles desprendidos de un cerro en la población de Atenas, al sur de San José, provocó 14 muertos y sepultó varias viviendas ubicadas en la base de la elevación.

Por otra parte, el sábado otras dos personas murieron en la localidad costarricense de Alajuela, donde desde un cerro se precipitó un alud de tierra de unos 40.000 metros cúbicos que arrasó siete viviendas. Trece personas aún se encuentran desaparecidas.

Las autoridades costarricenses de la zona del Pacífico Sur aseguran que hay 600 damnificados, en su mayoría menores de edad y mujeres, distribuidos en 11 albergues.

Por otra parte, en Honduras los muertos se registraron el viernes, cuando una embarcación evacuaba a 20 niños y tres adultos en la comunidad de El Chapernal, a 120 kilómetros al sur de Tegucigalpa. Tres menores de edad y una joven fallecieron ahogados después de que la embarcación volcase por la furia de las aguas del río en el que navegaba.

Entretanto, el jefe de Operaciones de la gubernamental Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Randulfo Funes, explicaba el sábado los esfuerzos del cuerpo en el rescate de las víctimas: “Toda la tarde y la noche estuvimos evacuando gente para ponerla a salvo en zonas seguras, en comunidades de los departamentos de Valle, Choluteca, La Paz y el cono sur de Francisco Morazán y El Paraíso”. El peligro estriba en que grandes extensiones del territorio hondureño se encuentran aisladas por tierra debido a las inundaciones y a los deslaves en carreteras.

En El Salvador hubo un muerto y un desaparecido en el centro y el occidente del país, respectivamente. Los evacuados suman unos 500, que residen provisionalmente en 13 albergues. Las dos víctimas fueron arrastradas por cauces de ríos desbocados por las lluvias. Un árbol gigante, de 100 años de vida aproximadamente, se desplomó el sábado sobre unas viviendas y dejó tres heridos.

En Nicaragua, el presidente, Daniel Ortega, decretó la alerta roja en la provincia norteña y montañosa de Chinandega, donde los evacuados ascienden a unos 4.000.

Los sistemas estatales de prevención de la región mantienen la alerta amarilla, probablemente hasta hoy (15 de octubre/07). (Nota publicada en EL PAÍS, de España www.elpais.com ).



Autor: Juan José Dalton
Fecha: 15 de octubre de 2007