martes, 29 de abril de 2008

Motín sangriento en Honduras

SAN SALVADOR -Autoridades y especialistas en violencia no se cansan de repetir que “las cárceles en Centroamérica son una bomba de tiempo”, pero poco o casi nada se hace para evitar los estallidos, como el último que ocurrió el sábado pasado en el penal de San Pedro Sula, al norte de Honduras, donde nueve reclusos fueron asesinados con salvajismo. Otros dos presos prisioneros están heridos, tras un episodio que se investiga entre pandilleros de las maras y miembros de otras bandas criminales.

Las víctimas mortales fueron identificadas como Roberto Arturo Contreras —conocido como El Chele Volqueta—, Ángel Alberto Martínez, Ricardo Mejía Lara, Jesús Ramírez, César Núñez, Carlos Alberto Rodas, Moisés David Rojas, Osman Joel García y Santos Alexánder Rodríguez Castillo.

De acuerdo con el comisionado Abraham Figueroa Tercero, de la policía de San Pedro, el enfrentamiento se originó cuando un reo identificado como Johnny Antonio Jiménez, alias El Inmortal, disparó a El Chele Volqueta. Tras el crimen, los dos grupos de los que formaban parte la víctima y el agresor se liaron en combate cuerpo a cuerpo, armados de cuchillos y machetes.

Peleas por el control de la cárcel

Las imágenes de televisión mostraban los corredores ensangrentados de la cárcel. La policía se hizo más tarde con el control del penal, que alberga a 3.000 internos y está ubicado en el centro de San Pedro Sula, la ciudad industrial de Honduras y la más violenta del país.

Las autoridades indicaron que las peleas son frecuentes entre los grupos de mareros activos y de aquellos que en la cárcel renuncian a las maras. Ambos pelean por el control de la cárcel. Son hechos también frecuentes en las cárceles de El Salvador y Guatemala, donde hasta el 40% de la población reclusa pertenece a las maras. Las cárceles centroamericanas tienen una superpoblación mayor del 50%, así como altos niveles de ociosidad, insalubridad y corrupción administrativa, según estudios de la Fundación para el Estudio y Aplicación del Derecho de El Salvador (Fespad).

El enfrentamiento entre los reclusos se protagonizó el sábado por la tarde y en horario de visitas. Cientos de personas se encontraban en el interior de la cárcel, pero no se registraron heridos entre los visitantes, aunque si “mucho terror e incertidumbre”, según relató un testigo.

Los Comandos de Operaciones Especiales del Ejército y la policía preventiva lograron penetrar en la zona de la revuelta, neutralizaron a los presos y tomaron el control del penal.

La policía estima que la muerte de El Chele Volqueta fue motivada por “encargo” de sus enemigos, que “ofrecían dinero para liquidarlo”. Este preso, consta en los informes policiales, habría colaborado para que en junio de 2006 se fugaran cuatro miembros de una banda mafiosa a la que se acusaba de haber secuestrado y asesinado a un hijo del ex presidente hondureño Ricardo Maduro. En abril de 1997 fue secuestrado y posteriormente asesinado Ricardo Maduro Andreu, de 25 años de edad.


El ministro de Seguridad de Honduras, Jorge Rodas Gamero, se trasladó en horas de la tarde del sábado al penal, suspendió temporalmente al director del mismo, el subcomisario Nazir López, y nombró una comisión para investigar los hechos, entre ellos, la evidencia de armas en el interior de la cárcel. (Publicado en El País: http://www.elpais.com/ ).


Autor: Juan José Dalton

Fecha: 28 de abril de 2008

jueves, 24 de abril de 2008

Desciende el número de homicidios en El Salvador por primera vez desde 2003

SAN SALVADOR - Quizás no sea suficiente, pero los salvadoreños amanecieron ayer con una buena noticia: los homicidios disminuyeron durante el primer trimestre de este año en un poco más del 10%, según demuestran las estadísticas del Instituto de Medicina Legal, la Fiscalía General y la Policía Nacional Civil (PNC). Es el primer descenso que se registra en los últimos cinco años, desde 2003.

De acuerdo al informe tripartito, en los meses de enero, febrero y marzo de 2008 el número de asesinatos llegó a 795, es decir, 95 menos que los ocurridos durante el primer trimestre de 2007, cuyo índice de muertes por homicidios fue de 890. Esta disminución supone un 10,7%. También significa que el promedio diario de muertos pasó de 9,8 a 8,7.

"Desde el 7 de mayo del año pasado se comenzó un esfuerzo continuo con una orden de operaciones Sariza. Tenemos una tendencia ya registrada de reducción de los homicidios, lo que va a seguir debido a que los planes de contingencia contra la criminalidad no han cesado", explicó Carlos Rugamas, director de comunicaciones de la policía. Los operativos Sariza consisten en "cierres" de calles o retenes, persecución de delincuentes en flagrancia, una mayor investigación y más patrullajes preventivos, de acuerdo al funcionario.

David Morales, encargado de Seguridad Ciudadana de la Fundación de Estudio y la Aplicación del Derecho (Fespad), considera que la registrada no es una "gran disminución; lo será cuando la tasa de homicidios baje a 36 por cada 100.000 habitantes, como la que se tenía en 2003". A partir de ese año, la tasa de homicidios inició un periodo de ascenso debido a los planes puestos en marcha por el Gobierno de Elías Antonio Saca (conservador) contra la violencia de las pandillas, llamados de Mano Dura, que privilegiaron la represión sobre la prevención, según Morales.


Al terminar 2007, la tasa de homicidios se situó en 61 por cada 100.000 habitantes, cinco veces más de lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera epidemia. Si la tendencia de la baja de los homicidios se mantiene, la tasa podría bajar en 2008 aproximadamente a 55 por cada 100.000 habitantes, que, a pesar de eso, continuaría siendo la más alta de Latinoamérica, según datos de la OMS. (Publicado en El PAÍS http://www.elpais.com/ ).


Autor: Juan José Dalton

Fecha: 24 de abril de 2008

martes, 22 de abril de 2008

La fuerza de la unión

SAN SALVADOR - Hace uno o dos meses nadie se lo hubiera ni siquiera imaginado, pero el resultado de dos encuestas electorales la semana pasada se habrían convertido en un catalizador para que los líderes políticos salvadoreños dieran un giro trascendental: la búsqueda y conformación de dos bloques poderosos, uno de derecha y otro de izquierda, que se enfrentarán en las elecciones generales de 2009, y en las que por el momento la ex insurgencia del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) se perfila como favorito. El partido oficialista, Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), al verse perdedor en las encuestas de Borge & Asociados (B&A) y en LPG-Datos, ambas publicadas en los diarios más conservadores, inició rápidamente conversaciones directas con el Partido de Conciliación Nacional (PCN) y Partido Demócrata Cristiano (PDC), con el objeto de negociar un acuerdo de alianzas o de coaliciones para las elecciones de enero y de marzo de 2009. Las primeras serán legislativas y municipales; la segunda será presidencial.En la otra cara de la moneda, lo mismo: el FMLN tratará de atraer a las fuerzas moderadas de izquierda: al Centro Democrático (CD) y al Frente Democrático Revolucionario (FDR).

Julio Hernández, líder del Frente Democrático Revolucionario (FDR), afirmó a EL PAÍS que la dirección de su partido se reunió el sábado y llegó a la conclusión siguiente: en 2009 las presidenciales estarán definidas entre Rodrigo Ávila, candidato de ARENA y Mauricio Funes, candidato de FMLN. Por otra parte, se aprecia la necesidad de tener el control de la Asamblea Legislativa (parlamento).

“La tesis del FDR es que hay que buscar el acercamiento entre las fuerzas de izquierda y las fuerzas progresistas para lograr una correlación que permita gobernabilidad democrática”, dijo Julio Hernández, en coincidencia con Roberto Lorenzana, encargado por el FMLN para las alianzas políticas, quien ha llamado a CD y FDR a conformar una coalición.

“Estamos abiertos a construir una estrategia común para que las fuerzas de izquierda en su conjunto podamos tener mayoría legislativa. ¿De qué serviría que la oposición ganara la presidencia en marzo si en enero no se habrían generado las condiciones de gobernabilidad democrática?”, apuntó el dirigente del FDR.

“Hay que pasar de las señales de humo a conversaciones directas. Hasta ahora hemos escuchado, tanto de Funes como de otros líderes del FMLN, declaraciones públicas. Pero en el nivel privado no se han producidos señales. Hay que pasar de la voluntad a construir una nueva realidad”, afirmó finalmente Julio Hernández.

La izquierda nunca ha estado en el Gobierno en El Salvador. Tras los acuerdos de paz que pusieron fin a la guerra civil (1980-1992), ARENA ganó consecutivamente en las tres elecciones presidenciales que han ocurrido. El posible triunfo de Funes en 2009 llevaría a El Salvador a una situación históricamente nueva y reforzaría la racha de triunfos de partidos de izquierda y de centroizquierda en Latinoamérica. (Publicado en EL PAÍS http://www.elpais.com/ ).

Autor: Juan José Dalton
Fecha: 22 de abril de 2008

viernes, 18 de abril de 2008

Al menos 13 muertos en un accidente de autobús en El Salvador

SAN SALVADOR - Un autobús del servicio interprovincial, en la zona occidental de El Salvador, ha caído este miércoles por un precipicio de más de 40 metros de profundidad, en un accidente que ha causado la muerte de al menos 13 personas y ha dejado heridas a decenas —se teme que puedan ser más de 60—, según informes preliminares de los cuerpos de socorro.


El accidente se ha producido a primera hora de la mañana, precisamente en un día en que los colectivos del transporte público salvadoreño habían decretado una huelga en protesta por el alto coste de los combustibles.



Se trata de un autobús de la ruta 235 que, según policías locales en el lugar de los hechos, transportaba a unas 75 personas. "El bus iba topado [repleto], precisamente por el paro del transporte", ha asegurado un agente de seguridad. El accidente ha ocurrido en las cercanías del puente Guajoyo, en el municipio de Metapán, provincia de Santa Ana, a 90 kilómetros al noroeste de San Salvador.



"Tenemos al menos 12 muertos; quedaron unos encima de otros, otros están entre los hierros retorcidos del bus", ha afirmado Ricardo Rosales, un miembro de la Cruz Roja Salvadoreña (CRS), que participaba en las labores de rescate. Una joven maestra ha muerto en el Hospital de Metapán. Miembros de Medicina Legal y de la fiscalía han advertido de las dificultades para el reconocimiento de cadáveres, porque ayer aún no había sido posible sacar a todos los cuerpos del interior del vehículo accidentado. Entre los heridos, 47 están graves y han sido trasladados a diversos centros hospitalarios de El Salvador, ya que los de las ciudades de Santa Ana y Metapán no llegaron a dar abasto.



Los investigadores aseveran que la causa del accidente puede haber sido la excesiva velocidad del autobús, cuyo conductor disputaba el paso con otro vehículo en medio de una curva.



El último accidente de gravedad en El Salvador ocurrió el 15 de enero de 2002; en él fallecieron 22 pasajeros en la carretera hacia Tacuba, en Ahuachapán, también en el oeste del país. (Publicado en EL PAÍS: http://www.elpais.com/ ).




Autor: Juan José Dalton


Fecha: 17 de abril de 2008

lunes, 14 de abril de 2008

Centroamérica, sitiada entre el crimen y la represión

SAN SALVADOR - En amplias zonas de El Salvador se observan estampas muy parecidas a las que se vivieron durante la época de la guerra civil (1980-1992): unidades de soldados y policías patrullando las calles, policías en retenes de carreteras, sitios diurnos y nocturnos y registros en barrios pobres con la presencia de medios de prensa para transmitir en directo la brutal captura de “sospechosos”.

La diferencia entre lo que sucedía antes y lo que sucede ahora es que durante la guerra se perseguía al “subversivo comunista” y en la actualidad, al pandillero o marero. Para algunas autoridades de la actual política de seguridad en El Salvador, basada en la dura represión del delincuente, la diferencia es mínima. De hecho, según el presidente salvadoreño, Elías Antonio Saca, impulsor del cuestionado Plan Súper Mano Dura, “las pandillas son peores que el terrorismo”.


Por eso, en la actualidad, al igual que durante el conflicto bélico, planea el fantasma de la guerra sucia: aparecen cadáveres de jóvenes con las manos atadas en la espalda, con señales de tortura y con un disparo en la nuca. Otros son ametrallados desde vehículos o motos en marcha. El pasado sábado, dos jóvenes, Daniel Alberto Vásquez Guevara, de 25 años, y su amigo Juan Carlos Arévalo García, de 17, fueron secuestrados; fueron encontrados horas después acribillados a balazos, en la zona de San Antonio Chávez, en la oriental provincia de San Miguel.


“Se estigmatiza al joven de barrio y se dice que es pandillero; se generaliza con que todas las pandillas son crimen organizado. Al final, lo que se hace es criminalizar la pobreza”, explica Jeannette Aguilar, experta en pandillas juveniles y directora del Instituto de Opinión Pública de la jesuita Universidad Centroamericana (IUDOP). Las maras no se han quedado con los brazos cruzados: su organización es ahora más sofisticada, compartimentada y clandestina, según informes policiales.


En la década de los ochenta, cientos de miles de salvadoreños emigraron a Estados Unidos huyendo de la guerra. La mayoría se estableció en los barrios pobres de Los Ángeles. Ahí nacieron las pandillas Mara Salvatrucha y Mara 18, en un principio integrada por jóvenes rebeldes, amantes del rock y de la vida loca, ligada al consumo de drogas.


Muchos de estos mareros fueron perseguidos y deportados de Estados Unidos. Así comenzó un tránsito imparable que hizo proliferar las maras por la llamada Ruta del Migrante: Guatemala, El Salvador, Honduras, los Estados fronterizos de México y las principales ciudades estadounidenses (Los Ángeles, San Francisco, Nueva York y San Francisco, entre otras).


Los planes Mano Dura (El Salvador), Puño de Acero (Honduras) o Escoba (Guatemala) —políticas ancladas en la represión— fueron apoyadas por Washington tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 como parte de la lucha contra el terrorismo, que también incluía un endurecimiento de la política migratoria. Desde 2003, El Salvador se convirtió en una especie de centro coordinador contra el pandillerismo a través de la celebración anual de una Convención Internacional Antipandillas, que la semana pasada tuvo su cuarta edición y en la que se reunieron cerca de 350 expertos y agentes policiales de El Salvador, Estados Unidos, México, Honduras, Guatemala, Puerto Rico y Costa Rica.


“Las conclusiones de dichos cónclaves llevan a lo mismo: la represión. Ahora están haciendo énfasis en aspectos de información e inteligencia. Lo que puedo decir, de acuerdo a nuestra experiencia, es que estos planes han fracasado; la violencia y los homicidios se han incrementado. La misma policía ha reconocido que, después de cinco años, las pandillas han incrementado su número de integrantes”, aseguró Benjamín Cuéllar, experto en derechos humanos e integrante de la Coalición Centroamericana para la Prevención de la Violencia Juvenil (CCPVJ), organismo que sostiene también que las convenciones han servido para justificar el incremento de los presupuestos policiales y a Washington le vale para asegurarse el “dominio en la zona en temas de seguridad”.


La mejor receta, la prevención


Hace cuatro años que el sacerdote español Antonio Rodríguez, de 35 años de edad, dirige un plan de prevención contra la violencia en la ciudad salvadoreña de Mejicanos, donde ejerce como párroco. “En este año me capturaron a 16 jóvenes que estaban integrados a mi parroquia. Los acusan de ser mareros, pero son jóvenes expulsados de sus hogares pobres y desintegrados. Los capturaron de madrugada, rompieron las puertas de sus casas para capturarlos, los golpearon y dejaron con miedo a todas sus familias... Amplias zonas de Mejicanos, de Zacamil y de Ayutuxtepeque [alrededores de San Salvador, la capital] están sitiadas por soldados y policías armados. ¡Ahora nadie quiere ir a los planes de prevención porque tienen miedo ser capturados y enviados a la cárcel! Otros jóvenes han sido asesinados”, denuncia indignado el sacerdote.


Los jóvenes salvadoreños no tienen muchas opciones: la migración en busca de trabajo y bienestar, que afecta a un tercio de la población de casi seis millones de habitantes, ha redundado a su vez en un incremento de la desintegración de la familia. La historia de cada pandillero responde a un patrón de violencia cíclica que recorre invariablemente el camino entre la víctima y el verdugo.


Así lo explica el experto Benjamín Cuéllar: “Es cierto que [los pandilleros] se matan por rivalidades, que están en el narcomenudeo y en las extorsiones. Sin embargo, el Estado autoritario que se ha impuesto sólo pone en la mira a las pandillas y deja de lado el crimen organizado, con nexos políticos y con los grandes poderes económicos. Es decir, aquí hay que cambiar muchas cosas y visiones; de lo contrario seguiremos en un círculo vicioso”. (Publicado en EL PAÍS: www.elpais.com ).
Autor: Juan José Dalton
Fecha: 14 de abril de 2008

Cónclave internacional en El Salvador para analizar la violencia de las pandillas

SAN SALVADOR - La 4ª Convención Internacional Antipandillas fue inaugurada ayer en un hotel de la costa occidental salvadoreña, en la provincia de Sonsonate, con la presencia del ministro de Seguridad y Justicia de El Salvador, René Figueroa, y el embajador de Estados Unidos, Charles Glazer. El evento reúne en el país centroamericano a unos 350 especialistas en temas relacionados con la violencia de las pandillas, especialmente agentes policiales de Estados Unidos, México, Puerto Rico, Guatemala, Honduras, Panamá, Costa Rica y El Salvador.

El objeto, según los anfitriones del evento, la policía y el Ministerio de Seguridad Pública de El Salvador, consiste en analizar y discutir los problemas que causan las pandillas —conocidas en Centroamérica como maras— y su vínculo con el crimen organizado. Oficialmente se cree que las pandillas son las autoras de la mayoría de los crímenes en El Salvador, que tiene la mayor tasa de homicidios de Latinoamérica: 60 por cada 100.000 habitantes.


El lema de la presente convención, que se extenderá hasta el viernes, es El intercambio de información, nuestro reto. La delegación salvadoreña presentará una ponencia sobre la “integración de esfuerzos y ejecución de acciones policiales frontales contra las pandillas”.
Por su parte, los representantes del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos presentarán estudios bajo los títulos de La incursión de los pandilleros en Internet, Las pandillas y el sistema penal y El sistema de huellas digitales regionales de pandillas.


Estas convenciones se realizan desde 2005, dos años después de que El Salvador pusiera en marcha los planes de Mano Dura, cuestionados por organizaciones independientes y de derechos humanos por estar centrados únicamente en acciones represivas. Especialistas como Jeannette Aguilar, de la jesuita Universidad Centroamericana (UCA), advirtieron constantemente de que la represión traería mayor violencia.


De hecho, las autoridades salvadoreñas informaron el lunes de que los miembros de las maras —principalmente la Salvatrucha y la 18— se habían incrementado hasta casi un 30%. Es decir, mientras en 2005 había 10.000 pandilleros registrados en El Salvador, en la actualidad sobrepasan los 13.000. Al mismo tiempo, más de 5.000 líderes de las maras se encuentran en prisión.


Las autoridades regionales estiman que en México, Guatemala, Honduras y El Salvador el número de pandilleros alcanza los 100.000, mientras que en Estados Unidos hay unos 800.000 de varias nacionalidades, según datos oficiales. (Publicado en EL PAÍS: http://www.elpais.com/ ).


Autor: Juan José Dalton
Fecha: 9 de abril de 2008

martes, 8 de abril de 2008

Muerte en el circo

SAN SALVADOR - En un hecho sin precedentes de violencia de las pandillas o maras, que cada día se recrudece en El Salvador, cuatro personas resultaron muertas y otras tres heridas en la noche del pasado viernes, tras ser atacadas por cuatro miembros de maras, que les dispararon con pistolas y un fusil de asalto AK-47, de fabricación rusa, según confirmaron ayer agentes de la Policía Nacional Civil (PNC). Los ataques entre las maras, así como los de grupos de exterminio contra las pandillas, no suponen ya ninguna sorpresa, pero la novedad de este acto criminal estriba en que fue ejecutado sin motivo aparente en contra de un grupo de personas que asistían a la función de un circo local.

Las investigaciones policiales informaron de que, aproximadamente a las 10:45 de la noche del pasado viernes, en la localidad de la Playa de los Cóbanos, en la occidental provincia de Sonsonate, cuando unos 50 asistentes al Circo Mágico Emperador habían salido fuera de la carpa en un momento de receso previo a la segunda parte del espectáculo, aparecieron cuatro hombres armados e iniciaron el tiroteo contra el grupo de personas.


Tres murieron en el acto: Frankestein de Jesús Martínez, de 37 años de edad; Ronal García Flores, de 23, y José Gustavo Caldonio, de 25. Zoila Erazo, de 23 años, falleció en un centro hospitalario, mientras otros tres heridos de bala se encuentran internados aunque fuera de peligro.


Tras el ataque, los pandilleros huyeron en un vehículo que fue localizado y seguido por la policía. En la persecución, los delincuentes colisionaron en el centro de la ciudad portuaria de Acajutla, a pocos kilómetros de donde ocurrieron los hechos. La policía logró capturar primero a dos pandilleros, entre ellos a un menor de edad, a quien se le decomisó una pistola de 38 milímetros. En el interior del vehículo que manejaban los delincuentes encontraron un fusil de asalto AK-47 y pelucas. El dueño del auto, Antonio Escobar, fue también detenido al día siguiente, ya que se sospecha que con el mismo coche se han perpetrado otros asaltos.


El Salvador es uno de los países más peligrosos de Latinoamérica, con una tasa de 60 homicidios por cada 100.000 habitantes. Las más peligrosas pandillas de la actualidad, la Mara Salvatrucha y la Mara 18, fueron creadas en Estados Unidos por salvadoreños en los años ochenta. En la actualidad, estas pandillas operan en las más importantes ciudades estadounidenses como Nueva York, Washington, Los Ángeles y San Francisco, y también en los Estados fronterizos de México, en Guatemala y en Honduras. (Publicado en El País, de España: http://www.elpais.com/ ).
Autor: Juan José Dalton
Fecha: 7 de abril de 2008

domingo, 6 de abril de 2008

El FMLN denuncia atentados contra sus alcaldes

SAN SALVADOR - El izquierdista partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) de El Salvador denunció ayer el atentado a balazos que sufrió uno de sus alcaldes y del cual el funcionario salió ileso, lo que se suma a una situación de zozobra que se vive en El Salvador ante la violencia común diaria y el clima de polarización política que se extiende en la medida que se acerca la fecha de las elecciones generales en 2009. Sigfrido Reyes, director de comunicaciones del FMLN, aseguró que durante la noche del pasado miércoles el alcalde de la ciudad de San Vicente, Rigoberto Saravia, sufrió un atentado cuando manejaba su vehículo, el cual tiene visibles impactos de bala.

Por otra parte, el pasado 9 de enero el alcalde de la ciudad de Alegría, en la provincia de Usulután, Moisés Funes, fue asesinado a pleno día. En el atentado fue herida de gravedad la funcionaria Zulema Rivera, que murió en un centro sanitario. “Del atentado sufrido por el alcalde Funes no hemos tenido información. Las investigaciones no avanzan y no queremos que este se convierta en otro caso más de impunidad”, apuntó Reyes. (Publicado en El País, de España http://www.elpais.com/ ).


Autor Juan José Dalton

Fecha: 5 de abril de 2008

martes, 1 de abril de 2008

Una ola de asesinatos y fugas de presos pone en evidencia la crisis de las cárceles de El Salvador


SAN SALVADOR - El pasado fin de semana fue especialmente violento para el sistema penitenciario de El Salvador, que adolece de una crisis basada fundamentalmente en el hacinamiento: dos reos procesados por graves delitos —homicidios y secuestros— fueron asesinados y sus cuerpos, abandonados en contenedores de basura, mientras que en un centro preventivo de menores 15 de sus internos se dieron a la fuga.

El doble asesinato ocurrió el domingo en el penal de Chalatenango, en el norte de El Salvador. Las víctimas fueron identificadas como Edwin Romero, de 23 años, y Sergio Barahona, de 28, que estaban siendo procesados por homicidios y secuestro, además de pertenencia a las pandillas juveniles conocidas como maras. Ésta es la segunda masacre de reos que se registra en este presidio en un mes. El pasado 5 de marzo fueron asesinados cinco reos en las mismas circunstancias: a cuchilladas o estrangulados y arrojados en basureros, sin que las autoridades de vigilancia se percataran de los actos violentos.

Durante el mes de marzo, 12 han sido los reos asesinados en todo el sistema carcelario salvadoreño. De los siete que murieron en Chalatenango, cin co eran pandilleros deportados de Estados Unidos, que supuestamente querían imponerse a los cabecillas locales, según las primeras investigaciones. De acuerdo al subdirector de la Policía Nacional Civil (PNC), José Luis Tobar, los crímenes pueden estar relacionados con la lucha por el control de las maras dentro de los presidios.

Por otra parte, 15 jóvenes del Centro de Menores Sendero de Libertad, de la provincia de Cabañas, se fugaron el sábado pasado; de ellos, sólo tres han sido capturados. Según los vigilantes del penal, los prófugos se evadieron al saltar los muros del centro.

Estos incidentes revelan que la crisis carcelaria en El Salvador se agudiza día a día. El hacinamiento es el principal de los problemas, ya que, aunque la capacidad de las instalaciones es únicamente para 7.000 internos, en la actualidad están ocupadas por más de 18.000, la mitad de ellos sin haber sido condenados, según fuentes oficiales. (Publicado en El País http://www.elpais.com/ ).

Autor: Juan José Dalton
Fecha: 1 de abril de 2008.

La "guerra de los melones"


SAN SALVADOR - Honduras, una nación pobre y casi olvidada en Latinoamérica, ha levantado cabeza y se encuentra en la actualidad inmersa en un conflicto comercial agudo nada menos que con Estados Unidos, el poderoso imperio del norte. El embate ya es conocido como la guerra de los melones, con un trasfondo político y mercantil.


Todo comenzó la semana pasada, cuando la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) pidió a los consumidores estadounidenses que “tiraran a la basura” los melones hondureños adquiridos en los comercios, después de que unos 50 ciudadanos de EE UU y Canadá enfermasen —15 de ellos fueron hospitalizados—, supuestamente tras ingerir fruta infectada con la bacteria de la salmonella, que produce estados diarreicos.


Tras la alerta de la FDA, unos 350 furgones con mercancía por valor de ocho millones de dólares de la empresa hondureña Agrolíbano fueron retenidos en las fronteras de Estados Unidos, bajo la prohibición de entrar en el país.


“La medida es catastrófica”, advirtió Óscar Molina, vicepresidente de la citada empresa, quien consideró que Honduras sufrirá pérdidas por más de 50 millones de dólares; de hecho, 1.800 trabajadores de los 20.000 que trabajan en la industria agrícola ya han sido despedidos.


Un mercado privilegiado


Entretanto, los empresarios hondureños tratan de evitar una guerra comercial con Estados Unidos, un mercado privilegiado para el 60% de sus exportaciones. Benjamín Bográn, director ejecutivo del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), explicó a la prensa local: “No podemos permitir que el Gobierno de Honduras se vea afectado por una guerra comercial en la que se ha involucrado a la FDA”, y agregó que se debe apoyar a las autoridades para que no haya un “efecto en cadena” por un caso aislado.


Reino Unido, en Europa, y El Salvador y Guatemala, en Latinoamérica, también detuvieron en sus fronteras los camiones con melones hondureños para examinarlos. Mientras, delegaciones ministeriales de Honduras se han desplazado a Washington, y la misma FDA envió de urgencia una misión investigadora a Honduras para inspeccionar los campos y la industria empaquetadora de melones. Los resultados científicos de tales investigaciones serán dados a conocer en los próximos días.


Tensiones políticas


Además de las consecuencias económicas, en todo este asunto resultan evidentes las tensiones políticas del continente. El Gobierno de Venezuela, presidido por Hugo Chávez, se ha “solidarizado” con Honduras y se ha declarado dispuesto a adquirir todos los melones que Estados Unidos rechace.


Por su parte, el mandatario hondureño, Manuel Zelaya, denunció en una entrevista con la cadena internacional CNN que Washington actuaba “injustamente” en este conflicto. Y en un gesto insólito, Zelaya sacó un melón, lo partió en tajadas y se comió una de ellas; “no hay salmonella”, aseguró el mandatario.


Carlos Imendia, catedrático salvadoreño residente en Honduras, recuerda que recientemente se produjo una situación parecida con la carne de pollos supuestamente infectados con salmonella procedente de granjas salvadoreñas, a las que autoridades de la FDA llegaron a amanazar con demandas judiciales. El analista cree que las naciones centroamericanas deben protegerse mediante las reglas para la solución de este tipo de conflictos previstas en el tratado de libre comercio (CAFTA, por sus siglas en inglés) suscrito hace tres años con Estados Unidos.


Imendia también advierte que Washington podría estar llevando a cabo una política mercantil para proteger o privilegiar a empresas meloneras mexicanas o propias, lo que cuestiona seriamente el concepto de “libre comercio” del CAFTA. Según el economista, quizá influya el hecho de que Honduras sea un país cercano a Gobiernos que Washington considera enemigos, como Cuba y Venezuela. (Publicado en El País: http://www.elpais.com/ ).


Autor: Juan José Dalton
Fecha: 31 de marzo de 2008