San Salvador (apro 15-3-2014)
Por Juan José Dalton
A las dos de la madrugada del jueves 13 el
presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de El Salvador, Eugenio
Chicas, dio a conocer el resultado del escrutinio final de las
elecciones del domingo 9 en las que se realizaron votaciones en segunda
ronda para elegir al próximo presidente de la República.
La
conclusión del TSE fue clara: las votaciones beneficiaron al candidato
de la izquierda Salvador Sánchez Cerén, del Frente Farabundo Martí para
la Liberación Nacional (FMLN), quien ese mismo día llamó a todas las
fuerzas políticas, económicas y sociales a un acuerdo de nación para
enfrentar los grandes problemas locales como la violencia, el desempleo y
la pobreza.
Pero la propuesta del FMLN no es gobernar solos, sino
con el acompañamiento de otros sectores políticos y sociales, incluido
la oposición, tal como lo anuncian la mayoría de líderes del partido
exguerrillero, quienes han negado que pretendan hacer algún tipo de
revolución, en su defecto proponen: la época actual es de entendimiento e
integración.
Sánchez Cerén aventaja por apenas 6 mil 364 votos,
es decir 0.22 puntos porcentuales de la votación válida, a Norman
Quijano, de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena),
quien desconoció inmediatamente los resultados. El día de las
elecciones, cuando se contabilizaba apenas el 50% de las actas
electorales, montó una conferencia de prensa y se
autoproclamó presidente electo. Horas más tardes el escrutinio
preliminar fue adverso para la derecha.
La situación actual de El
Salvador nunca había tenido lugar en la historia de este país
centroamericano: hay un triunfador de los comicios, pero no se le ha
proclamado al presidente electo porque existen pendientes recursos
legales de nulidad de las elecciones que el TSE debe resolver.
El
abogado y exmagistrado del TSE, Félix Ulloa, aclara a Apro que “nunca se
había dado en El Salvador semejante conflicto que se está dirimiendo en
el campo jurídico. Al siguiente día de las elecciones Arena presentó un
recurso de nulidad del proceso electoral; en estos momentos el TSE
estudia las pruebas y resolverá quizás la próxima semana”.
“Sólo
hay un caso más o menos parecido a nivel internacional: el de México de
2006, cuando el Partido de la Revolución Democrática (PRD), que
postulaba a Andrés Manuel López Obrador, alegaba que había ganado la
contienda y que le habían cometido fraude a favor de Felipe Calderón,
del Partido de Acción Nacional (PAN)”, explicó Ulloa, quien recalcó que
el conflicto local también podría extenderse como ocurrió en el caso
mexicano.
Por su parte, Salvador Sánchez Cerén, junto con el resto
de los dirigentes más importantes del FMLN, ha asegurado que “las
elecciones han sido limpias, transparentes y legítimas”.
“Los
candidatos de Arena y su liderazgo saben que han perdido, pero son malos
perdedores”, afirmó el diputado Roberto Lorenzana, jefe de
Comunicaciones del partido izquierdista.
“Estamos esperando que a
los señores de Arena se les pase el mal momento de la derrota para
podernos sentar y diseñar una ruta de diálogo para una agenda común”,
añadió Lorenzana, para más adelante señalar que “habrá que tener
confianza en la palabra y la propuesta de Sánchez Cerén porque con él se
estará hablando con el ‘poder real’ del FMLN”, aseguró en referencia a
que no pasa ni pasará lo mismo que tener nexos con el actual presidente
Mauricio Funes, porque éste no es un militante del FMLN, mientras que el
candidato triunfador “es uno de los principales fundadores y dirigentes
del partido izquierdista”.
El beneficio de la duda”
Medardo
González es también excomandante insurgente, al igual que
Sánchez Cerén. Ocupa el cargo de secretario general del FMLN. Tras de
que el TSE informó de las estadísticas del escrutinio
final, González explicó cuál es la ruta a seguir por el FMLN en los
próximos días.
“Bueno, nos hemos reunido con el candidato a hacer
agenda. Lo primero que tenemos en mente es la conformación del equipo de
transición nuestro, con el del presidente saliente. Imagínate que ahí
nuestro futuro presidente tiene gran labor porque él es vicepresidente
de la República”, apuntó González, quien en 2009, cuando
triunfó Funes, también tenía a su cargo la dirección del partido.
“También
tenemos en agenda al equipo que va a trabajar el Plan de Nación, que es
de largo plazo y para el cual hemos llamado a la oposición y le
tendemos un puente”, acotó.
El líder del FMLN mencionó que “los
problemas no esperan” y que “es urgente iniciar en el desarrollo de los
planes de seguridad, porque la inseguridad es lo que más agobia a los
salvadoreños; el tema del empleo y cómo vamos a resolver la
productividad de la economía, porque sólo así se genera empleo”.
“A
ese empresariado que ha tenido una postura política e ideológica
contraria a nuestro partido, pues que nos den el beneficio de la duda.
Los llamamos a sentarse con nosotros, para ver si es posible elaborar
agenda. Sé que tenemos puntos de vista distintos y a veces encontrados
sobre la mayoría de aspectos: económicos, políticos y sociales. Pero
debemos hacer un intento porque estamos dispuestos a entrar en una
lógica de entendimiento”, dijo González.
“No estamos pensando en
locuras, lo que queremos es combatir la pobreza y que no haya más gente
hambrienta ni descalza. Juntos, empresarios y Estado, podemos juntar
esfuerzos para resolver estos problemas”, reconoció finalmente González,
quien fue conocido durante el conflicto armado como “Comandante Milton
Méndez”.
De acuerdo a las propuestas que ha hecho el FMLN, en
especial el triunfante Sánchez Cerén, “se está trabajando en la
conformación de un equipo de trabajo que diseñe lineamientos
estratégicos para hacer de El Salvador un país productivo”.
“Este
equipo multidisciplinario debe diseñar las líneas para convertir a El
Salvador en un país productivo, educado, saludable y seguro para los
próximos 25 años. Se trata de construir acuerdos económico sociales y
cómo revivimos y reactivamos la economía que fue estancada por el
neoliberalismo”, explicó otro de los dirigentes del FMLN, José Luis
Merino, conocido en la guerra como “Comandante Ramiro Vázquez”.
“El
mensaje que nos ha enviado la sociedad salvadoreña en estas elecciones
es que debemos tener entendimiento e integración. Por eso puedo decir
que estamos contentos con haber sido certeros en la decisión de llevar
como candidato a Salvador”, reconoció Merino.
“Tendremos al frente
del gobierno al tercer guerrillero de Latinoamérica que asume el
gobierno en esta etapa de democracia. Él es un hombre honesto y
transparente, al mismo tiempo que ha despertado la confianza de la
sociedad. Esto va a fortalecer la relación del FMLN con la sociedad y
estamos muy contentos en haber propuesto a un exjefe, a un comandante de
la guerrilla para que fuera el futuro presidente de El Salvador”,
finalizó José Luis Merino.
http://www.proceso.com.mx/?p=367277 (Revista Proceso, de México)